jueves, 27 de julio de 2017

5 mitos sobre las infecciones urinarias

Los síntomas incluyen: orinar frecuentemente, ardor al orinar, sensación urgente de orinar, fiebre, orina maloliente y dolor en bajo vientre.

Hay muchos mitos y verdades relacionados a este tema, y la educación e información son claves para cuidarse.

1. Las infecciones urinarias les pasan sólo a las mujeres

Falso. Si bien pueden ser menos comunes, los hombres también pueden padecer infecciones urinarias.
Es muy importante que los hombres vayan directamente al doctor, ya que podría significar un problema a la próstata.

2. El uso de baños públicos causa infecciones

Falso. Si bien los baños públicos tienen muy mala fama, no puedes contagiarte de una infección urinaria al usarlos.
Una de las medidas que ayuda a prevenir las infecciones, es ir al baño cada vez que se tengan ganas.

3. Quedarse con el bikini mojado aumenta la probabilidad de infectarse

Verdadero. Importante mencionar que la humedad en la zona aumenta las posibilidades de contraer una infección urinaria.
El uso constante de protectores y toallas higiénicas también puede generar humedad y, por lo tanto, contribuir al contagio.

4. El jugo de arándano ayuda a curar la cistitis

Falso. En base a un estudio realizado por la base Cochrane, que revisó múltiples trabajos que comparaban jugo de arándanos y placebo se llegó a la conclusión que el jugo de arándanos parece no tener un beneficio significativo en la prevención de cistitis en su consumo a largo plazo.

5. La cistitis se contagia sexualmente

Falso. No es una enfermedad venérea, es decir, no se contagia a través de las relaciones sexuales.
Es importante limpiarse y cuidar la higiene después de una relación sexual, ya que eso sí puede producir una infección.

martes, 7 de marzo de 2017

¿Qué es un trasplante de riñón?

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La hemodiálisis y la diálisis peritoneal son tratamientos dirigidos a sustituir la función de los riñones que han dejado de funcionar. Estos tratamientos le permiten a usted vivir más tiempo y sentirse mejor, pero no son una cura de la insuficiencia renal terminal. Mientras que en la actualidad los pacientes con insuficiencia renal terminal viven más tiempo que nunca, a lo largo de los años se pueden presentar problemas severos. Los más frecuentes son: tensión arterial alta, anemia, trastornos en los huesos y lesiones de los nervios.

El trasplante de riñón es un procedimiento que consiste en colocar en el cuerpo un riñón sano proveniente de otra persona (familiar o un donante cadáver). Este riñón único cumple con todo el trabajo que los dos riñones enfermos no pueden hacer.

El cirujano colocará el riñón en el cuerpo del paciente cosiendo la arteria y la vena del riñón a una arteria y una vena del paciente (receptor) que generalmente es la arteria y vena ilíaca externa. La sangre pasa a través del nuevo riñón y produce la orina al igual que en los riñones sanos. El nuevo riñón podría comenzar a funcionar inmediatamente o podría tardar varias semanas en comenzar a producir orina. Los riñones del paciente se dejan en su lugar a menos que causen infección o aumento de la tensión arterial.

Para la realización del trasplante se busca que el riñón sea lo más compatible posible que la persona que lo va a recibir para intentar evitar el rechazo del nuevo órgano.

El tiempo que se tarda en encontrar un riñón varía por lo que se deben anotar los receptores en una lista de espera hasta que se encuentre el riñón que sea más compatible para él. La operación lleva entre 2 y 4 horas, dependiendo de la complejidad del caso y del estado de las arterias y las venas del paciente que lo va a recibir.

Siempre existe la posibilidad que el receptor rechace el riñón trasplantado, por lo que se deben administrar durante toda la vida medicamentos (inmunosupresores) para frenar la reacción del sistema inmunitario. En ocasiones estos medicamentos no evitan que el organismo rechace el riñón por lo que se debe retirar y el paciente debe volver a realizar algún tipo de diálisis hasta que se pueda realizar otro trasplante.

Las complicaciones del tratamiento inmunosupresor es que al frenar el sistema inmunitario del individuo pueden condicionar la aparición de infecciones. Algunos de estos medicamentos pueden producir cataratas, acidez gástrica y trastornos de la articulación de la cadera, además pueden dañar el hígado o el riñón.

Preguntas que le pueden surgir durante la diálisis peritoneal:

  • ¿Es el mejor tratamiento para mí? ¿Porqué? En caso contrario, porqué no?
  • ¿Cuáles son las posibilidades de tener un trasplante exitoso?
  • ¿Cómo puedo averiguar si un miembro de mi familia pueden ser donantes?
  • ¿Cuáles son los riesgos que corre el miembro de mi familia que dona?
  • ¿Cuáles son los signos o síntomas de rechazo?
  • ¿Me afectará mi vida sexual?
  • ¿Cómo se siente uno cuando se presenta un rechazo del riñón?
  • Podré seguir trabajando si me hacen un trasplante?